La flacidez en los brazos es uno de los problemas que más preocupan a las mujeres. Si además se acerca el verano y está localizada en su cara interna, todavía peor. Y es que muchas mujeres no utilizan prendas con tirantes o escotes palabra de honor para un evento. Este problema puede afectar incluso a las más delgadas, y también es conocido como «alas de murciélago».

Por qué sucede

La flacidez es la pérdida de firmeza y de tono muscular. Está relacionada con el proceso de envejecimiento y la degradación que sufren las fibras de colágeno y elastina. La traducción es un descolgamiento de los tejidos que puede afectar a diversas partes del cuerpo. También al rostro, perdiendo la forma tersa del óvalo facial, que por causa de la flacidez queda totalmente desdibujado.

La flacidez en los brazos está motivada por otras razones como acumulación de líquidos, sedentarismo, cambios bruscos de peso o incluso la herencia genética. Comienza a manifestarse a los 30 o 35 años. Por ello, son necesarios tanto su prevención, como su tratamiento.

Remodelar, reducir y reafirmar los brazos

En casos en los que la grasa está localizada, la gama de productos corporales Soin du Corps de ANESI, propone diferentes soluciones que, combinadas con la tecnología estética más avanzada (T3), pueden ofrecer resultados eficaces y duraderos, tanto para prevenir como para tratar este problema.

Recuerda que es importante que los tratamientos estéticos y los productos cosméticos no trabajan solos. Para prevenir y tratar la flacidez de los brazos, es necesario que acompañes tus tratamientos de una dieta equilibrada y de ejercicios específicos para bíceps y tríceps.

Ejercita y tonifica

Existen multitud de ejercicios para tonificar los músculos de los brazos que puedes hacer en casa. Estos ejercicios, con constancia y dedicación, pueden dar los resultados que esperas. Utiliza pesas, cogiendo una en cada mano con los brazos rectos y estirados a ambos lados del cuerpo. Lleva las pesas hacia los hombros sin despegar los codos (15 repeticiones). También puedes hacer ejercicios con mancuernas y ejercicios de extensión específicos para los tríceps.

Además de los ejercicios que puedes hacer en el día a día, existen otros deportes que pueden ayudarte a mejorar la flacidez en los brazos como la natación (que puedes practicar a cualquier edad y con la que conseguirás mejorar la musculatura de los brazos, pero también de los hombros y los pectorales) o el tenis (que además te resultará perfecto para quemar calorías).

Hidratación básica

Igual que te aplicas una crema a diario para tu rostro, es importante que seas consciente de la importancia que tiene la hidratación, también para la piel de tu cuerpo. Con el proceso de envejecimiento la piel se vuelve más fina y seca. Por ello, no te centres sólo en la reafirmación de los tejidos, sino también en su hidratación.

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